CHEF DEL MES

Su carrera dio un giro un día transitando por Periférico cuando vio un anuncio solicitando cocineros a bordo de los Cruceros Celebrity Cruises, decidió aplicar y para su sorpresa fue aceptado. Trabajó a bordo cerca de 5 años visitando más de 84 países y colaborando con staff de más de 50 nacionalidades, sin embargo, no estaba preparado para los siguientes sucesos. Un día organizó una fiesta de cabina con sus compañeros, la cual se salió de control por pasarse de copas, ocasionando su despido y su bajada del crucero en Estocolmo Suecia.
Decidió no regresar a México y darse una nueva oportunidad en el este país, trabajando como ilegal comenzó a vender pan dulce en los hostales de Suecia, después voló a Francia trabajando nuevamente sin documentos en Paris, Montendre, y en los países Vascos por parte de Francia, donde finalmente llegó a tener estabilidad hasta que el fatídico día que fue detenido por la policía migratoria.
Estuvo internado en una cárcel para migrantes por 6 meses, donde desde el primer mes empezó a cocinar en los comedores, al segundo mes ya era el jefe de cocina y llegados los 6 meses lo regresaron a México.
De regreso en su natal país, encontró trabajo inmediatamente, sin embargo, no lograba adaptarse después del ritmo de vida que había tenido. Comenzó a contactar a todos los chefs y conocidos del medio que había hecho durante su trayectoria y fue así como un chef ejecutivo de Estocolmo lo apoyo para arreglar su visa y conseguir una entrevista; a la semana ya estaba de regreso en Estocolmo, sin dinero, pero con toda la intención de conseguir una nueva oportunidad.

A los tres meses ya contaba con su Visa de trabajo, pero los primeros dos años no podía trabajar en otro lado así que empezó a crecer dentro del Hotel, en ese lapso de tiempo llego a tener 10 cocinero a su cargo, incluso sin tener el idioma Sueco al 100%. Al paso de dos años le renovaron su Visa, consiguiendo cambiar de trabajo, por fin podía trabajar donde él quería y no solo donde se podía.
Después se volvió a mover de Ciudad a Gotemburgo, aquí ayudó a aperturar un restaurante Mexicano.

Su trayectoria lo regreso a Estocolmo para colaborar en cadenas de hoteles, esta vez con mayor responsabilidad y coordinando personal de 5 países diferentes.

En el 2017 trabajó por primera vez en la cena de los Premios Nobel, el único inmigrante cocinando en esa brigada. En el 2018, se asoció con unos amigos inaugurando un segundo restaurante mexicano llamado Chelas.
Más adelante, coordino el proyecto de una Vinoteca latinoamericana “Tocayo”, la marca y el renombre de los restaurantes creció, gracias a un menú 100% mexicano y tradicional con la filosofía de ofrecer más que tacos. En la creación del munú, se importan ingredientes de 5 países europeos, tardando 4 años en perfeccionarse. Después de un intenso trabajo vendió sus restaurantes, ya que nunca fueron su pasión, los veía más como una inversión.

Actualmente, aun es miembro de la brigada de cocina de Stadhuset, staff responsable del banquete de los premios Nobel; tiene participación en revistas de gastronomía Mexicana fuera de México, e incluso fue invitado a participar en un libro de cocina de la chef Soledad Ornelas; lo que lo motivo a comenzar con el desarrollo de su propio libro de cocina.